¡Hola!
Te traigo una historia de hoy:
A las 15 tenía sesión con una clienta. 30 minutos antes me escribe y me dice:
"Ro, imposible llegar. Nos vemos la próxima" (aclaro: la sesión era online)
"Ok. Es la segunda vez que cancelas sobre la hora, la tercera es la vencida. Si volves a cancelar no seguimos con el proceso", le contesté.
"No sabía que te tenía que avisar con anticipación. Dejamos ahora si querés. Saludos!", me dijo
Esta es una de las cosas que me sacan cuando ocurren.
Siento que no respetan mi tiempo ni mi trabajo, ya que ni me pidió disculpas ni me dio una explicación de algún problema que hubiera tenido.
Ni siquiera cuando se lo marqué.
¡Cómo siguió la charla? Te lo cuento al final.
Ahora me interesa compartirte mis reflexiones: cuando nos pasan estas cosas, generalmente nos sentimos víctimas de la situación y que el otro es el villano que nos viene a atacar.
Sentimos que el otro es injusto, que no nos ve, no nos valora, no sólo a nosotros y nuestro tiempo, sino tampoco a nuestro trabajo.
Todo el trabajo que hicimos hasta ahora con ella, era capaz de descartarlo sólo por jugar a la ofendida, porque ése fue el rol que eligió.
Y entonces me pregunté, ¿qué pasa si cambio mi mirada?
Si elijo ver que el villano es el que nos convierte en héroes? Porque no hay héroe sin villano, él es el que desata nuestro poder personal, es el que nos invita a vernos a nosotras mismas y ser conscientes de las múltiples elecciones que tomamos.
En definitiva, podemos usar al villano para empoderarnos y mostrarnos al mundo de una mejor manera, coherente con quién queremos ser en el mundo.
¿Cómo terminó la historia?
Abandoné mi papel de víctima y retomé mi rol de coach: le expliqué lo que significaba en mi agenda que cancele a último minuto, y también le expliqué lo que significaba en su vida emprendedora esto de siempre dejar las cosas ante el primer inconveniente.
Que esto me demostraba que no estaba comprometida con el proceso, y que yo no trabajo con personas no comprometidas, ya que es perder tiempo y dinero ambas.
Que no era para enojarse ni ofenderse, sólo ser responsables frente a nuestras elecciones.
Lo entendió, me pidió disculpas y me preguntó si podíamos tener la sesión…. Pero le dije que no, que ahora tenía que esperar una semana
Espero que esta historia te sirva para ver en qué situaciones te estás poniendo en actitudes que no te suman para llegar a donde querés llegar
Con cariño,
Ro
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PD1: "Antes de juzgar, asegúrate de que eres perfecto." Joker
