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Cuándo te convertiste en quién eres?

Cuándo te convertiste en quién eres?

Las historias que nos contamos para vivir la vida que vivimos

Hola!

 

Alguna vez te encontraste pensando: cómo llegué hasta acá? Por qué estoy viviendo esto? En qué momento mi vida tomó este rumbo?

 

Estas son preguntas que todas nos hacemos alguna vez en la vida. Generalmente cuando las cosas no salen como queremos: nos damos cuenta que nuestro trabajo no nos gusta, o no entendemos cómo hicimos para endeudarnos tanto, o para sostener tanto tiempo una pareja que nos hace mal…. Te pasó alguna vez?

 

También puede ser que nos hagamos estas preguntas cuando las cosas nos van muy bien. En algún momento pensamos: esto es real? De verdad me está pasando a mí? Qué hice para merecer esto? Espero que también hayas tenido esta sensación alguna vez!

 

Y hoy vamos a tratar de entender qué nos trae hasta donde estamos.

 

En mi último mail te conté de la importancia de tomar conciencia de nuestros modelos mentales, y cómo el decidir cambiarlos puede tener un gran impacto en nuestra vida. Te dejo el link por si no lo leíste o querés repasarlo: https://preview.mlsend2.com/j4l3o3n2z0

 

Ahora vamos a ir un poco más profundo, para entender cómo y por qué nos convertimos en quien somos.

 

Hay una frase muy conocida que dice: "Somos prisioneros de nuestro pasado". Te sentís identificada? Te representa?

 

La realidad es que algunos acontecimientos que vivimos de pequeñas, condicionan nuestro presente. La teoría del apego sostiene que la forma en que nos relacionamos con otros y por qué nos comportamos como lo hacemos es producto de lo que experimentamos en nuestra primera infancia.

 

Si te atendían cuando llorabas, o si te dejaban llorar cuando precisabas atención, tiene incidencia en cómo respondes hoy. Por ejemplo: si quien te cuidaba era indiferente y no respondía cuando llorabas, puede ser que seas una adulta que busca permanentemente que le den atención.

 

Piensa: De qué manera lo que sucedió en tu infancia afecta tu forma de relacionarte con los demás?

 

No sólo las experiencias de la infancia tienen incidencia en nuestro presente. También las situaciones con alta carga emocional que vivimos de adultas generan huellas que nos hacen tender a actuar en consecuencia.

 

Te dejó una pareja de la que estabas muy enamorada? La lección que asimilas es que nunca más vas a enamorarte, porque no puedes confiar en nadie. No quieres volver a sentir ese dolor.

 

Te cuento el caso de Nora, una emprendedora con un proyecto de economía circular para el mercado textil:

 

Ella estaba muy emocionada con su idea, ya que sabía que podría producir un impacto positivo en el medio ambiente, al reducir la huella de carbono Contrató a un programador para el desarrollo de su aplicación, le contó su idea y le pagó el 50% del importe del proyecto para que empezara a trabajar. Pasaron los días, las semanas, los meses, y todo lo que el programador le mostraba a Nora no le gustaba. La relación comenzó a deteriorarse: ella sentía que él no la entendía y él pensaba que a ella nada le venía bien. Finalmente, el programador pidió que le pague el 100% del proyecto, ya que la cantidad de horas invertidas era mucho mayor a la que había presupuestado inicialmente. Nora le pagó, pensando que seguiría trabajando en el proyecto, pero él desapareció, dejando la aplicación con varios detalles sin terminar.

 

Nora se sumió en la tristeza y la desesperación. Se dijo a sí misma que el mundo del emprendimiento no era para ella, y que lo mejor era olvidarse de esto y seguir con su trabajo regular, con un jefe y un sueldo.

 

Pensó que era su mejor opción, y que estaba siendo prudente actuando de esta manera. Y seguramente lo era, pero lo más probable es que se privó de un crecimiento significativo que seguramente hubiera sido posible.

 

No sólo ella no se dio la posibilidad de crear una nueva opción, sino que además no permitió al mundo contar con la solución que ella diseño.

 

Te das cuenta qué importantes son las conclusiones que sacamos sobre nuestras experiencias? En este caso, ella no se animó a ver esta experiencia como un aprendizaje, que le enseñaría a ser más cautelosa la próxima vez, y directamente dejó que esta experiencia la marque como "fracasada, que no sirve para emprender!"

 

Muchas veces no nos damos cuenta que quien somos hoy es el resultado de las historias que nos contamos a nosotras mismas sobre lo que nos sucedió en el pasado. Y lo más importante es que "son historias que nos contamos" . No son la realidad. Si Nora hubiera insistido con su proyecto, seguramente hubiese sido diferente…

 

Pero al engancharnos con nuestro drama, no nos damos esa oportunidad.

 

Te propongo este ejercicio:

  1. Revisa tu vida. Retrocede tanto como puedas
  2. Haz una lista de los acontecimientos más relevantes emocionalmente. Qué sucedió? Qué emoción fue la más significativa en ese momento?
  3. Reflexiona: qué lección aprendiste de esta circunstancia? Lamento comunicarte que la lección que anotaste seguramente es una historia que te inventaste y te sigues contando a ti misma. No es necesariamente algo cierto, pero es algo en lo que crees.
  4. Ahora pon atención a esta historia: crees que te sirve para alcanzar el siguiente nivel en tu vida? Tu vida será mejor con esta historia o sería mejor dejarla ir?
  5. Reescribe la historia y los aprendizajes, de manera que ahora sean lecciones que te sirvan para llegar a donde quieres ir. Por ejemplo, si tu historia era: "Fulanito me dejó, me rompió el corazón y yo ahora no puedo confiar en nadie". Podrías reescribirla así: "Fulanito se fue porque ya no resonábamos juntos. Yo sentí mucha tristeza, pero me doy cuenta que es una experiencia que tenía que pasar para encontrar una nueva relación, en la que la confianza sea un valor compartido". Te resuena?
  6. Puedes ver si alguna de tus historias se repite?
  7. Revisa los modelos mentales que identificaste días atrás. Pregúntate: por qué crees lo que crees? Hay alguna historia atrás? Vuelve a repetir el punto 5, para ir eliminando creencias que no te suman.

 

Cuando examines tu vida a través de esta lente, reconocerás que muchas de las historias que te estas contando no te sirven. Veras que son un obstáculo y no un apoyo para avanzar.

 

Y cuando tomes conciencia de esto, habrás dado el primer paso para dejarlas ir sin mayor conflicto, por lo que no continuaran limitando tu vida.

 

Si llegaste hasta aquí, felicitaciones!!! Y si además hiciste el ejercicio, mi reconocimiento más profundo!! Eres del 5% de las personas que toman acción para hacer de su vida una vida de película.

 

Cuéntame cómo te fue y a qué conclusiones llegaste!

 

Hasta la próxima semana!

 

Con cariño,

Ro

Tu coach de resultados

 

PD: Te dejo una frase para que tengas a mano esta semana:

“Si oyes una voz en tu interior que dice: ‘no puedes pintar’, pinta por todos los medios y esa voz será silenciada.” Vincent Van Gogh

 

PD2: no te olvides de compartirme tus avances! Me encanta tener noticias tuyas!

Las historias que nos contamos para vivir la vida que vivimos

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